El presidente del Colegio Departamental de Economistas de Tarija, Fernando Romero, alertó a través de Radio Fides que el país enfrenta una “tormenta perfecta” que pone en peligro tanto la producción como el acceso a los alimentos. Esta advertencia se dio tras conocerse que Bolivia fue incluida en la lista de países con riesgo de agravamiento en su seguridad alimentaria.
Entre los factores más críticos de esta crisis se encuentran la escasez de carburantes, la falta de divisas en el mercado, la inflación acumulada y la devaluación acelerada del boliviano.
La inflación acumulada hasta mayo de 2025, que alcanzó un 9,81 %, es la más alta registrada en los últimos 40 años. Esta situación golpea directamente los ingresos reales de las familias bolivianas y encarece la canasta básica.
La producción también está comprometida. El agro nacional, altamente dependiente del diésel importado, atraviesa dificultades para acceder a carburantes, lo que paraliza las actividades productivas y logísticas del sector.
/// GPP // LA PAZ ///
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