En el departamento del Beni, el pueblo indígena Tsimane se declaró en estado de emergencia ante el incumplimiento de la orden constitucional que reconoce su derecho propietario sobre tierras ancestrales y anula 19 resoluciones previas del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA), que beneficiaban a grupos interculturales. Los Tsimanes advierten que la negativa de estos sectores a desalojar los territorios podría derivar en enfrentamientos y responsabilizan al Estado por la falta de acciones. Exigen al Ministerio Público que intervenga de manera inmediata para garantizar sus derechos.
“Continuaremos con las acciones legales y sociales que sean necesarias hasta que se respete nuestro derecho al territorio”, sostiene el Consejo Tsimane.
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