El avance del cambio climático está modificando los patrones meteorológicos y alterando el equilibrio natural, generando riesgos para la vida humana y para todas las formas de vida del planeta. En el umbral del tercer siglo de vida independiente, Bolivia enfrenta el desafío de un nuevo pacto por el desarrollo, uno que sea sostenible y que responda a las amenazas climáticas que afectan especialmente a los pueblos indígenas.
El biólogo Julio Rojas advierte que se vienen grandes transformaciones climáticas a escala global, nacional y regional. Uno de los casos más notorios, señaló, fue el derretimiento del glaciar Chacaltaya, considerado en su momento la pista de esquí más alta del mundo. Sostiene que, de continuar la tendencia, para 2050 el oriente y la Amazonía boliviana podrían enfrentar un proceso de sabanización, debido al aumento de las temperaturas, que ya superan los 36 grados en algunas zonas. Las sequías prolongadas, agregó, incrementan el riesgo de incendios forestales, como los registrados en Santa Cruz. El presidente de la Central Indígena de Pueblos Originarios de Pando (CIPOAP), Javier Fernández, afirmó que los cinco pueblos originarios de Pando atraviesan actualmente una fuerte sequía.
/// JCP // PANDO ///
Facebook Comentarios