Los bloqueos que se llevan adelante en carreteras de Cochabamba y en Yapacaní, Santa Cruz, afectan directamente a los transportistas quienes encuentran preocupados por que las medidas han evitado que puedan acceder a comida, agua y en casos extremos, a salud, este último servicio requerido por choferes de la tercera edad.
En Yapacaní se cumplen 11 días desde el inicio de protestas, propiamente en el sector del Puente Ichilo que une a Santa Cruz con Cochabamba donde conductores de vehículos de transporte pesado varados en la región se han visto en la necesidad de pedir colaboración a la gente que pasa por el lugar y alimentarse de las frutas que les obsequian mientras esperan solución a las medidas.
“Ya no tenemos plata para comer y quisiera que los bloqueadores nos den cuarto intermedio para al menos llegar a nuestras casas porque estamos más de 10 días acá. Nos pedimos de un pesito a un pesito para nuestro almuerzo o desayuno y a veces nos regalan, nos regalaron piñas”, detalla uno de los testimonios en la ruta.
Similar panorama se advierte en Cochabamba donde trasportistas ya han demandado al gobierno ayuda inmediata en alimentos y salud. Las altas temperaturas producen malestares que requieren de atención médica.
“Algunos necesitan de atención médica porque hay caballeros de la tercera edad que están en sus cabinas y que el calor les sienta mal. Pasaban ambulancias y les pedíamos que nos den paracetamol, pero no nos hacían caso y ya no volvían más”, precisó otro chofer.
11 días de bloqueos de sectores evistas han tenido consecuencias negativas en sectores productivos del país, las medidas que iniciaron como un pedido de atención a demandas sociales y otras políticas escalaron en hechos de violencia y un creciente desabastecimiento de alimentos.
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