La crisis en el acceso a medicamentos e insumos médicos en Bolivia empeora por el escenario político polarizado. Muchas familias deben recurrir a rifas, campañas o kermés para conseguir recursos que posibiliten tratamientos, ante un sistema de salud que parece desbordado y un Estado ausente. La ministra de Salud, María René Castro, dejó gestiones en curso que, según informes de trabajo social del hospital San Juan de Dios, no lograron el impacto necesario para mitigar la escasez.
Mientras tanto, la tensión política encabezada por Evo Morales, con bloqueos y discursos que dividen, derivan en más presión sobre los sectores vulnerables. La medida de fuerza disfrazadas de demandas sociales provoca escasez e incertidumbre. La lucha por el poder está profundizando una crisis.
/// DLR // TARIJA ///
Facebook Comentarios